SAT Condado cumple 40 años afrontando el relevo generacional y la apertura de nuevos mercados internacionales

SAT Condado de Huelva ha cumplido 40 años de trayectoria en un momento clave para el sector agrario onubense, marcado por la necesidad de garantizar el relevo generacional, contener el aumento de los costes de producción y consolidar modelos empresariales capaces de competir en mercados cada vez más exigentes. La cooperativa ha celebrado este aniversario con un acto conmemorativo que ha servido para repasar su evolución desde 1985 y, al mismo tiempo, para reflexionar sobre los desafíos económicos que condicionan el futuro del campo.

Durante el encuentro, SAT Condado de Huelva puso en valor un recorrido que refleja la transformación del modelo agrícola en la provincia de Huelva, desde estructuras productivas de carácter local hacia organizaciones con mayor dimensión empresarial, planificación y orientación al mercado. Cuatro décadas en las que la cooperativa ha tenido que adaptarse a cambios profundos en la política agraria, la comercialización, la tecnología y las exigencias de los clientes. Como destacó su presidente, Andrés Martín, la cooperativa ha pasado de una producción centrada inicialmente en la fresa a una clara diversificación con la incorporación de frambuesas y arándanos, junto a una apuesta continuada por la modernización de instalaciones, la innovación tecnológica y la mejora de la eficiencia productiva.

Uno de los hitos que marcó esa evolución fue su integración en Onubafruit, una decisión estratégica que permitió a SAT Condado de Huelva acceder a canales de comercialización internacional y ganar estabilidad en un contexto de creciente competencia global. Esta integración en una de las principales plataformas de comercialización de frutos rojos de Europa permitió a la cooperativa ganar dimensión, reforzando su capacidad para competir en un entorno dominado por grandes operadores y cadenas de distribución.

La pertenencia a Onubafruit ha supuesto para SAT Condado de Huelva un salto cualitativo en términos de comercialización, planificación y valor añadido. La apertura a mercados exteriores ha permitido diversificar destinos, mejorar la estabilidad de precios y reducir la dependencia de campañas puntuales, un factor clave para sostener la rentabilidad de las explotaciones y facilitar el relevo generacional en el campo.

No obstante, el foco del aniversario estuvo especialmente en el presente y el futuro. El relevo generacional se situó como uno de los grandes retos estructurales. La edad media de los productores, la incorporación de los jóvenes al sector, en muchos casos recogiendo el testigo de sus propios padres, y la incertidumbre derivada de factores como el clima, la regulación o los costes energéticos y laborales son los principales escollos a los que se enfrenta todo el sector.

En este sentido, desde la cooperativa se subrayó que garantizar el relevo no es solo una cuestión social, sino eminentemente económica. La viabilidad de las explotaciones pasa por contar con estructuras sólidas, dimensión suficiente y acceso estable a los mercados, elementos que permiten ofrecer rentabilidad y reducir la exposición a la volatilidad de cada campaña.

El acto del 40 aniversario sirvió también para destacar el papel del cooperativismo como herramienta para afrontar estos desafíos. La concentración de la oferta, la planificación conjunta y la capacidad de negociación siguen siendo factores determinantes para sostener el tejido productivo en un contexto de presión creciente sobre los márgenes. Uno de los momentos más emotivos de la celebración fue el reconocimiento público a José María Contreras Morejón, gerente de SAT Condado de Huelva, por su dedicación, liderazgo y visión estratégica. Durante su gestión, la cooperativa ha reforzado su competitividad mediante la diversificación de cultivos, la modernización de infraestructuras y la apuesta por la innovación y la sostenibilidad, destacándose además su cercanía y compromiso con agricultores y trabajadores.

Tras cuatro décadas de actividad, SAT Condado de Huelva afronta así una nueva etapa en la que el reto no es tanto crecer, sino consolidar un modelo que garantice continuidad, competitividad y valor añadido. El aniversario se plantea, más que como una celebración, como un punto de reflexión sobre cómo asegurar que el campo onubense siga siendo una actividad económicamente viable y capaz de atraer a nuevas generaciones.