Los ministros de Agricultura de la UE abordan la simplificación de la PAC que prevé un ahorro de hasta 1.800 millones

Debaten este lunes y martes la propuesta de la Comisión Europea (CE) que busca mejorar la competitividad del sector y otros temas comerciales de actualidad, como los aranceles y el acuerdo UE-Mercosur

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Agricultores labran las tierras con ayuda de tractores.
Agricultores labran las tierras con ayuda de tractores. / CE

Luxemburgo/Los ministros de Agricultura de la Unión Europea (UE) se reúnen este lunes y martes en Luxemburgo para debatir, entre otros temas, las medidas de simplificación de la Política Agrícola Común (PAC) propuestas por la Comisión Europea el pasado mes de mayo.

Las medidas, dirigidas a mejorar la competitividad del sector, pretenden flexibilizar los pagos y evitar un solapamiento de las normas sobre los controles ambientales a las explotaciones, además de reforzar el apoyo a los agricultores de la UE afectados por catástrofes naturales o enfermedades animales.

La propuesta, que permitiría un ahorro de hasta 1.580 millones de euros anuales para los agricultores y 210 millones de euros para los Gobiernos nacionales según Bruselas, persigue flexilizar y agilizar la gestión los pagos, la carga administrativa y las herramientas de crisis.

Los ministros mantendrán un debate sobre la propuesta con el que se espera "orientar los próximos pasos en esta materia" dada la "ampliamente favorable" respuesta inicial, según indicaron fuentes diplomáticas.

El ministro de Agricultura español, Luis Planas, valora la propuesta presentada por la Comisión, ya que “recoge buena parte de las solicitudes presentadas por España”. A su juicio, supone un “importante avance” hacia una mayor simplificación y reducción de la carga burocrática demandada por los Estados Miembros.

El nuevo paquete agrícola, que debe ser adoptado por el Consejo y el Parlamento Europeo, se basa en las medidas de simplificación ya introducidas por la Comisión Europea en 2024 y forma parte de un proceso más amplio relativo a políticas que afectan a los agricultores, las empresas agroalimentarias y los gobiernos nacionales.

Aranceles y Mercosur

"Es probable" que los ministros también aborden temas comerciales de actualidad relacionados con la política arancelaria de EE.UU, las importaciones procedentes de Ucrania o los avances en el acuerdo UE-Mercosur, apuntaron las mismas fuentes.

La política de imposición de aranceles por parte de EE. UU. ha sido un elemento de alejamiento estos últimos tiempos entre la UE y Washington, si bien las dos partes están manteniendo negociaciones para tratar de eliminar esos gravámenes.

El pasado mes de mayo, el mandatario estadounidense, Donald Trump, dio un paso más con su amenaza de imponer aranceles directos del 50% a la Unión Europea a partir del 1 de junio debido a que las negociaciones comerciales con la UE "no están dando frutos".

Tras una conversación con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ambos acordaron una prórroga para extender las conversaciones para lograr un acuerdo sobre los aranceles hasta el 9 de julio.

Von der Leyen y Trump, mantuvieron el pasado lunes una reunión bilateral en el marco de la Cumbre del G7 tras la cual la líder del bloque comunitario señaló que ambos han ordenado a sus equipos acelerar la negociación comercial. Bruselas confía en llegar a un principio de acuerdo para esa fecha, pero los Veintisiete admiten que será necesario seguir negociando los detalles más allá del 9 de julio.

En cuanto al acuerdo entre la UE y los países del Mercosur, en su recta final para su ratificación tras la firma el pasado mes de diciembre, sigue siendo una de las principales preocupaciones para algunos países europeos.

Francia e Italia han reclamado conjuntamente "mayor equilibrio" en el acuerdo para proteger eficazmente el sector agrícola y para hacer respetar las reglas sanitarias europeas.

"Italia y Francia consideran que, aunque contiene ventajas, el acuerdo de la UE no protege suficientemente a los agricultores europeos contra los riesgos de perturbación del mercado y no garantiza de forma sostenible la soberanía alimentaria del continente", precisaron en un comunicado difiundido el pasado viernes.

Ambos países reafirman la necesidad de incluir cláusulas para garantizar la equidad en las normas sanitarias, medioambientales y sociales, de modo que haya equilibrio entre los productores a los dos lados del Atlántico.

Prácticas desleales y apoyo al vino

Los ministros debatirán a lo largo de dos días la situación de varios expedientes legislativos que pasarán a manos de la próxima presidencia del Consejo de la UE, la danesa. Entre ellos se encuentran las propuestas sobre la Organización Común de Mercados, las prácticas comerciales desleales y otras relativas al apoyo al sector del vino.

También se informará a los ministros sobre el estado de las negociaciones sobre las nuevas normas de protección animal durante su transporte, así como los avances en la actualización de la normativa sobre materiales de reproducción vegetal.

En cuanto a las normas sobre plantas obtenidas a través de nuevas técnicas genómicas (NTG), que se encuentran en proceso de negociación con el Parlamento Europeo, fuentes diplomáticas indicaron que se intentará "alcanzar un acuerdo provisional con el PE sobre todas las cuestiones pendientes" durante el trílogo previsto para finales de junio.

Del mismo modo, se pretende alcanzar una orientación general entre los ministros sobre el reglamento de seguimiento forestal, así como sobre las orientaciones para 2026 basadas en una comunicación de la Comisión Europea sobre la situación de la pesca sostenible en la UE.

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