China insta a EEUU a realizar "esfuerzos" a horas del vencimiento de la tregua comercial

Pekín quiere alcanzar un "resultado positivo basado en la igualdad, el respeto y el beneficio mutuo", mientras Trump le pide que cuadruplique sus compras de soja a EEUU

Banderas de EEUU y China en una empresa en Pekín.
Banderas de EEUU y China en una empresa en Pekín. / Wu Hao, EFE

A horas de que expire la tregua comercial entre China y Estados Unidos, el gobierno chino ha expresado su esperanza de que EEUU realice "esfuerzos" para alcanzar un "resultado positivo basado en la igualdad, el respeto y el beneficio mutuo".

Pekín espera que "EEUU colabore con China para cumplir con el importante consenso alcanzado entre los dos jefes de Estado, aproveche el mecanismo de consulta económica y comercial establecido y se esfuerce por lograr un resultado positivo basado en la igualdad, el respeto y el beneficio mutuo", declaró la portavoz del Ministerio chino de Exteriores en un comunicado.

En mayo, ambas partes acordaron en Ginebra una tregua que expira este martes, que incluyó una reducción de 115 puntos porcentuales en los aranceles que se habían impuesto mutuamente desde principios de abril, y que habían resultado en un embargo comercial de facto entre las dos mayores potencias económicas del mundo.

A finales de julio, las dos partes mantuvieron sus últimas conversaciones en Estocolmo, donde reafirmaron su voluntad de priorizar el diálogo sobre la escalada en una guerra comercial que llegó a amenazar con desordenar las cadenas de suministro y sacudir los mercados.

Tras la reunión en Estocolmo, el negociador chino Li Chenggang mencionó que se había acordado extender la tregua. Sin embargo, el representante comercial estadounidense, Jamieson Greer, advirtió que los aranceles sobre las importaciones chinas podrían rondar el 80 u 85% si no se llegaba a un acuerdo para corregir el actual desequilibrio comercial y la "sobrecapacidad" exportadora de Pekín.

No obstante, Greer aseguró después en una entrevista con la cadena CBS que ambas partes están "trabajando" para extender la tregua, mientras que el secretario de Comercio, Howard Lutnick, señaló que es posible otra pausa "de unos 90 días" más.

El encuentro en la capital sueca siguió a reuniones anteriores en Ginebra y Londres, así como a una conversación telefónica en junio entre el presidente estadounidense, Donald Trump, y su homólogo chino, Xi Jinping, para limar asperezas.

EEUU llegó a imponer aranceles del 145% a los productos chinos, mientras que Pekín elevó al 125% los suyos sobre los estadounidenses. Sin embargo, después Washington bajó los gravámenes al 30% y China al 10%.

Tras la reunión en Ginebra, los equipos negociadores se volvieron a citar en junio en Londres, donde se saldó con la aprobación, por parte de Pekín, de solicitudes de exportación sobre las tierras raras. Estados Unidos, por su parte, canceló algunas de las "medidas restrictivas" que había impuesto a China, como los controles a la exportación de chips.

Trump pide a China que compre más soja

Entretanto, Trump instó el domingo a China a que cuadruplique sus compras de soja al país norteamericano, algo que algunos analistas interpretan como una condición para extender la tregua.

"China está preocupada por la escasez de soja. Nuestros grandes agricultores producen la soja más robusta. Espero que China cuadruplique rápidamente sus pedidos de soja. Es también una forma de reducir sustancialmente su déficit comercial con EEUU", escribió en su red Truth Social. Trump aseguró que "se proporcionará un servicio rápido" ante el aumento en la demanda del grano. "Gracias, presidente Xi (Jinping)", concluyó su mensaje.

En los últimos días también ha entrado en escena una hipotética sanción a Pekín por importar petróleo de Rusia ante la negativa del Kremlin a detener la guerra en Ucrania, algo que podría descarrilar las negociaciones.

China defiende su derecho a mantener relaciones normales con el resto de sus socios comerciales y rechaza la presión de Trump, quien el viernes mantendrá una histórica reunión con Putin en Alaska que podría determinar el rompecabezas de disputas entre grandes potencias.

El secretario estadounidense del Tesoro, Scott Bessent, en una entrevista al diario nipón Nikkei, se refirió a China y calificó de "difíciles" las negociaciones con Pekín, ya que el gigante asiático "es una economía no de mercado, y las economías no de mercado tienen objetivos diferentes".

Señaló asimismo la sobreproducción china y sus exportaciones de grandes volúmenes de productos a precios extremadamente bajos. "Creemos que gran parte de la producción está por debajo del costo. Es un programa de empleo. Tienen objetivos de empleo y de producción, más que de rentabilidad", destacó.

stats