La inflación repunta otras dos décimas en septiembre por el alza de los carburantes y la luz

Los variación en tasa mensual respecto a agosto descienden en cuatro décimas en el contexto del final de la temporada estival

El gasto en pensiones sube un 6,09% en septiembre hasta los 13.638 millones de euros

Evolución anual del IPC de España. Fuente: INE
Evolución anual del IPC de España. Fuente: INE / Departamento de Infografía

La inflación en España retoma la escalada que inició tras alcanzar en mayo el 2% que marca como objetivo el Banco Central Europeo. En el mes de septiembre que culmina este martes, los precios escalarán dos décimas respecto al dato de agosto, según el indicador adelantado elaborado y difundido este lunes por el Instituto Nacional de Estadística (INE). El IPC adelantado de septiembre queda así fijado en el 2,9% en tasa anual.

Esto supone que desde mayo, los precios se han incrementado en nueve décimas y, salvo en agosto que se estabilizó en el 2,7% que marcó en julio, el IPC ha ido repuntando progresivamente. De ahí ese aumento de dos décimas en el presente mes de septiembre. Esta trayectoria ascendente evidencia la dificultad de las autoridades monetarias para contener de manera sostenida las presiones inflacionistas, a pesar de las sucesivas bajadas de tipos de interés implementadas por el BCE en los últimos meses.

Esas dos décimas de incremento en tasa anual se producen, según el INE, principalmente porque los precios de los carburantes y de la electricidad bajan menos que en septiembre de 2024. La comparación interanual refleja así un efecto base menos favorable, ya que hace un año los costes energéticos experimentaron descensos más pronunciados que los observados en el mes actual. Esta menor caída de los precios energéticos se debe, en parte, a la persistente volatilidad de los mercados internacionales de crudo y gas, que continúan condicionados por tensiones geopolíticas y decisiones de producción de los principales países exportadores.

Frente a esta evolución anual, los precios de consumo bajaron en septiembre. El indicador adelantado del IPC arroja una tasa mensual del -0,4% respecto al mes de agosto. Este descenso mensual responde a factores estacionales típicos de este periodo del año, como el fin de la temporada turística de verano y la moderación de los precios de determinados productos y servicios que experimentan alzas durante los meses estivales. No obstante, esta corrección puntual no altera la tendencia de fondo que muestra un repunte sostenido de la inflación en tasa interanual.

Baja la subyacente

Esa tendencia a la baja de los precios en tasa mensual sí concuerda con la evolución de la inflación subyacente, el indicador que mide los precios excluyendo productos con mayores variaciones, como los alimentos no elaborados y los productos energéticos. Este índice resulta especialmente relevante para los analistas económicos y los responsables de política monetaria, ya que permite identificar las presiones inflacionistas estructurales al filtrar los componentes más volátiles.

En septiembre, la tasa de variación anual estimada de la inflación subyacente (índice general sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) disminuye una décima, hasta el 2,3%. Este retroceso sugiere que las presiones inflacionistas de carácter más permanente están cediendo gradualmente, aunque todavía se mantienen por encima del objetivo del BCE. La moderación de la subyacente resulta especialmente visible en sectores como el textil y la restauración, que habían experimentado fuertes incrementos de precios en meses anteriores como consecuencia de las tensiones en las cadenas de suministro y el encarecimiento de los costes laborales.

Respecto al Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA), el que se usa para comparar la inflación de España con los países de su entorno europeo, en el mes de septiembre la tasa de variación anual estimada del IPCA aumentó aún más que el general: tres décimas, lo que lo sitúa en el 3,0%. Esta mayor divergencia del indicador armonizado responde a diferencias metodológicas en el cálculo y ponderación de determinados componentes, lo que puede generar discrepancias entre ambos índices en momentos de alta volatilidad de precios.

La tasa anual estimada de la inflación subyacente del IPCA se sitúa en el 2,4%. Por su parte, la variación mensual estimada del IPCA es del 0,1%, lo que contrasta con la caída del -0,4% registrada por el IPC general en tasa mensual y refleja la mayor resistencia a la baja de determinados componentes incluidos en el índice armonizado.

Estos datos sitúan a España en una posición intermedia dentro del panorama inflacionista de la zona euro, por debajo de economías como Alemania o Francia en algunos indicadores, pero con una dinámica que evidencia la persistencia de presiones al alza que complican el proceso de convergencia hacia el objetivo de estabilidad de precios del BCE.

Valoración del Gobierno

Tras conocer la evolución de la inflación, en una entrevista en Las mañanas, de RNE, el ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo, ha insistido en que los datos se sitúan "en línea con lo esperado" y se explican, principalmente, por los efectos base en carburantes y, en menor medida, electricidad.

Cuerpo ha remarcado, igualmente, que los datos muestran "una continuación del progreso de moderación hacia delante de los precios para llegar al objetivo del Banco Central Europeo (BCE), que está en torno al 2 %" y que "se sigue cumpliendo" porque los salarios siguen evolucionando y "los españoles van recuperando poder adquisitivo".

stats