El presidente de CNMV insta a las empresas a celebrar al menos una rueda de prensa de resultados anual

La transparencia es algo “fundamental” para los mercados financieros, pero debe ser un concepto que se extienda de forma generalizada en el mundo empresarial y no se ciña “exclusivamente” a las compañías cotizadas. Así lo ha defendido este lunes el presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Carlos San Basilio, quien ha insistido en que es necesario hacer un “esfuerzo” para conseguir que la información fundamental de las empresas sea conocida por el mayor número posible de inversores, en condiciones similares.

San Basilio ha inaugurado una jornada sobre los retos en las relaciones entre empresas y periodistas organizadas por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE), la Asociación de Directivos de Comunicación (DIRCOM) y la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) en la sede de la CEOE en Madrid. La sesión ha servido para hacer un balance de la situación de la transparencia informativa siete años después de que la CNMV publicase una serie de recomendaciones al respecto para compañías y medios de comunicación y cuatro años después de que la APIE y DIRCOM firmasen un protocolo de compromisos éticos.

En su intervención, el presidente de la CNMV ha retomado la idea presente en el documento de 2018 de que los líderes de las compañías “presenten sus resultados de forma pública al menos una vez al año”. Además, ha instado también a que “empleen de forma clara” las medidas alternativas de rendimiento (como son el Ebitda, la deuda neta o el beneficio subyacente). Asimismo, ha señalado como práctica fundamental que “la información relevante esté disponible a la mayor brevedad posible”.

San Basilio ha señalado además que la prensa económica en España goza “de buen nivel”, si bien el gremio pasa por dificultades como la situación económica de las empresas periodísticas, la alta rotación en las redacciones y la constante necesidad de formación de los periodistas. En su valoración del trabajo de la prensa, ha pedido a los periodistas que no cejen en la contrastación de la información y en el correcto uso de los datos.

En lo referente a la propia CNMV, su presidente ha apuntado que el propio organismo supervisor está tomando medidas para mejorar los criterios de emisión de la información de la institución, haciéndola más clara y accesible. Así, la CNMV está “revisando las políticas de comunicación para ser más activos, se quiere mejorar la claridad del lenguaje, se buscan nuevos canales de comunicación y se va a renovar la página web”, ha explicado.

Transparencia en los medios

Posteriormente, Elena Herrero-Beaumont, codirectora del Observatorio de Medios, ha manifestado que la situación de la transparencia en el sector ha mejorado en los últimos diez años, cuando “los medios de información en España, salvo las empresas cotizadas, por obligación legal, no tenían un código de transparencia y buen gobierno en la mayor parte de los casos”.

Herrero-Beaumont también se ha referido a la ley de transparencia para medios puesta en marcha por el Gobierno, de la que ha afirmado que busca “traer a España el espíritu de un reglamento europeo”, el cual permitirá “ver quiénes son los dueños de los medios, las empresas propietarias del accionariado, y eso es muy importante si queremos ver qué agendas hay detrás de ciertas coberturas y analizar el reparto de publicidad institucional”. Sí ha criticado el proceso de comunicación de la ley que, en su opinión, “se tenía que haber hecho mejor, de forma menos política”.

No todo son ruedas de prensa

La jornada se ha cerrado con una mesa redonda en la que han participado David García-Maroto, Director adjunto de Comunicación, Relaciones Institucionales y Sostenibilidad en CEOE, Macarena Muñoz, presidenta de la APIE y Miguel López-Quesada, presidente de Dircom. Durante la misma, la presidenta de la APIE ha celebrado la petición de San Basilio de celebrar una rueda de prensa anual, aunque ha precisado que solicita a las empresas que “se haga en formato presencial”. Es, ha añadido, una de las peticiones constantes que hace la APIE, pues cada vez más empresas tratan de imponer “formatos online” que impiden el contacto directo con los directivos. Muñoz ha recordado también que, por ahora y pese las constantes peticiones de transparencia, no todas las compañías cumplen la recomendación de la CNMV. De hecho, tal y como ha constatado la APIE, 32 de las 50 grandes empresas no convocaron este año una rueda de prensa para presentar sus resultados de 2024.

La presidenta de la APIE ha recordado que la transparencia de las empresas se mide también durante todo el año con “encuentros, respondiendo al teléfono u organizando off the records”. Ello, ha argumentado, es lo que permite sentar las bases de la confianza entre el periodista y las empresas en mayor beneficio de ambas partes, de la transparencia informativa y de la calidad en las informaciones.

La confianza es elemento fundamental también para el presidente de DIRCOM, Miguel López-Quesada, quien considera esencial mantener “una relación profesional” entre el mundo de la empresa y los periodistas. Sin embargo, ha puntualizado que si bien “una rueda de prensa anual es una buena práctica, que apoyamos desde Dircom” no conviene juzgar a las empresas “solo sobre la base de si celebra esa rueda de prensa o no, sino por cómo se están comportando en el día a día en su relación con los periodistas. En este sentido, hay otras muchas acciones que las empresas pueden trabajar en favor de la transparencia: los tiempos de respuesta, dar contexto, poner un portavoz al otro lado, entre otras”.

La transparencia, ha concluido, no se puede evaluar sólo por una «puesta de largo» con una rueda de prensa, ya que “la comunicación es un activo estratégico y las empresas son soberanas para decidir cómo quieren utilizarla, siempre que el principio de transparencia esté presente».

David García-Maroto, director adjunto de comunicación de la CEOE, se ha mostrado de acuerdo en que “el contacto permanente entre empresa y periodistas es algo sano que debería fortalecerse”, sobre todo porque unos y otros se necesitan para que la transmisión del mensaje sea adecuada. Se trata, ha argumentado, de “naturalizar” el contacto con los periodistas, asumiendo que “cuando un líder se enfrenta a la prensa el riesgo cero no existe, pero hay que asumirlo”. Sin olvidar, ha puntualizado, “que cada empresa es libre para hacer lo que considere”.